Florida, 2 sep.- La actual situación electroenergética impone incrementar en Florida las medidas de ahorro en instituciones estatales, privadas y en el sector residencial, con el objetivo de lograr mayor respuesta a la demanda de ese recurso imprescindible para el desarrollo de las actividades socioeconómicas del municipio y del país.
“Aun cuando el llamado al uso racional de la energía parezca una paradoja en medio del fuerte déficit de generación actual, resulta imprescindible si se tiene en cuenta que un elevado por ciento del combustible disponible en el país se destina la producción de electricidad, en detrimento de otras necesidades vitales de la economía y los servicios”, expresó Beatriz Rodríguez Fernández, coordinadora de Programas Energéticos en el Gobierno provincial de Camagüey.
“La convocatoria al ahorro no es un capricho, es una estrategia de respaldo al esfuerzo diario de la Unión Eléctrica para mantener de alta las centrales térmicas; y del Estado cubano en la compra de combustibles a precios elevados, enfrentando las medidas, trampas y limitaciones impuestas por el férreo bloqueo del gobierno de Estados Unidos contra el pueblo de Cuba.
Estos y otros detalles deben conocerlos el pueblo, los obreros y las comunidades para formar conciencia sobre el uso eficiente de la electricidad”, concluyó en Florida la coordinadora de Programas Energéticos en el Gobierno provincial, y para ello solicitó el apoyo de la Central de Trabajadores de Cuba, del resto de los organismos de masas y de la comunicación social, institucional y comunitaria en barrios y centros laborales.
Extremar aquí el control del Consejo de la Administración y las estructuras del Poder Popular sobre el empleo del combustible asignado al municipio, enfrentar el robo y desvío de este recurso básico, y adoptar medidas de impacto contra el fraude en el consumo de la energía eléctrica son prioridades a mantener en el territorio, puntualizó la directiva.