Brasilia, 6 may.- La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) comunicó que usa drones para ayudar a localizar e identificar a las víctimas de los temporales que golpean el estado Rio Grande do Sul, donde se registran hasta hoy 78 muertes.
Según la FAB, los sobrevuelos del avión no piloteado RQ-900 Hermes ocurren en la región de la Cuarta Colonia, que abarca nueve municipios de la Región Central de la división territorial.
Orienta que, al escuchar o ver la aeronave, las personas en situación de riesgo deben señalizar o hacer marcas en alguna superficie para facilitar la identificación y el envío de apoyo.
El aparato permite el análisis en tiempo real y con alta precisión de las zonas expuestas.
Las fuertes lluvias en el estado comenzaron en la última semana de abril.
En total, 332 de los 496 municipios registraron algún tipo de problema, afectando a 707,1 mil personas.
Los meteorólogos explican que la catástrofe es el resultado de al menos tres fenómenos y resultan agravados por los cambios climáticos.
En el último informe de la Defensa Civil estadual se confirmó esa cantidad de fallecidos por la inclemencia del tiempo y otras cuatro muertes confirmadas están siendo investigadas, para verificar si tienen relación con la catástrofe.
También están notificados 105 desaparecidos y más de 150 heridos.
Agencias meteorológicas pronostican que deben cesar este lunes las precipitaciones.
Predicen que puede aparecer el Sol en diversas regiones y el nivel de los ríos mantendrá la tendencia a la caída.
De acuerdo con la empresa privada MetSul, el territorio recibirá la masa de aire caliente que cubre Paraná, sudeste, centro-oeste y el tiempo se abrirá en gran parte del territorio.
Sin embargo, todavía hay riesgo de temporales en el extremo sur.
A lo largo del domingo, aguaceros todavía cayeron en diversas partes del estado, pero, según análisis de MetSul, la mayor parte de los afluentes tienen tendencia a la baja.
El Instituto Nacional de Meteorología no tiene alertas previstas en los próximos días.
Pese a estos vaticinios, la Defensa Civil emitió ayer la alerta para inundación extrema.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva retornó este domingo al estado (estuvo el jueves) y afirmó que La reconstrucción de las carreteras destruidas por los desbordamientos en el territorio tendrá el apoyo del Gobierno federal.
Por las afectaciones, el gobernador Eduardo Leite se refirió el 2 de mayo a la tragedia como «el mayor desastre climático» de la historia de Rio Grande do Sul y decretó estado de calamidad pública.
Tomado de Prensa Latina
