Florida, 25 nov.- La agricultura floridana está obligada a desatar sus nudos de ineficiencia, imponer control y organizar el trabajo en la base en busca de cumplir los compromisos productivos del presente, asegurar los proyectos del futuro y garantizar la demanda agroalimentaria del territorio.
Para alcanzar ese objetivo es necesario frenar de inmediato el incumplimiento del contrato lechero por parte de un número alarmante de ganaderos del municipio, cortar el desvío del ordeño diario y concertar el acopio del mayor volumen posible de ese renglón para el venidero año.
De acuerdo con lo dicho aquí en presencia de la máxima dirección del Partido Comunista de Cuba (PCC) en la provincia de Camagüey, los agropecuarios de Florida tienen, además, la obligación de cubrir con verduras y hortalizas los más de 1600 canteros de la granja urbana, de los cuales casi la tercera parte permanecen improductivos.
El encargo para la Delegación municipal de la Agricultura en la actual etapa incluye redoblar la exigencia para concluir los 45 módulos pecuarios previstos en las unidades del sector y del Sistema azucarero, encargo iniciado hace más de una década con resultados irrisorios en esta demarcación.
Como parte de la palabra empeñada, el organismo rector de la gestión agropecuaria en el territorio debe concentrarse, asimismo, en el control de la tierra y la batalla contra el delito y las ilegalidades en su radio de acción; garantizar el suministro seguro de viandas, frutas y hortalizas a los centros educacionales y de Salud, y hacer cumplir los acuerdos y orientaciones del Gobierno y el Partido Comunista de Cuba en la presente coyuntura económica.
