Florida, 9 sep.- El embarazo adolescente se mantiene como un punto rojo entre las preocupaciones del Sistema de Salud Pública y de varias instituciones sociales y del Gobierno en el municipio de Florida, por su incidencia, riesgos y marcado impacto en la vida de las niñas y los niños, en la familia y en la comunidad.
Hasta el cierre de julio, casi el 22 por ciento del total de embarazos captados por el territorio correspondieron a mujeres que no completan las dos décadas de vida, incluidas nueve gestantes que aún no sobrepasaban los 15 años de edad.
De acuerdo con la información ofrecida por la doctora Maidelys Cisneros Armenteros, jefa del departamento Materno Infantil de la Dirección Municipal de Salud Pública en Florida, llama la atención también el número elevado de partos adolescentes registrados hasta el mes de agosto, con un total de 70 alumbramientos.
La propia especialista comentó, una vez más, sobre los riesgos y peligros acompañantes del embarazo en el periodo de las infancias, entre los cuales resaltó la enfermedad vascular hipertensiva, el parto pretérmino y la hemorragia postparto, junto a los índices de bajo peso y la morbilidad de los recién nacidos de madres adolescentes.
Desde el punto de vista socioeconómico cada estadística significa una vida y, por tanto, una muchacha grávida o con su hijo pequeño verá siempre limitada su educación futura, sus capacidades y posibilidades de insertarse en el ámbito laboral, será más vulnerable a la violencia por motivos de género y puede enfrentarse al déficit de ingresos por desocupación.
Al llamado del sistema sanitario local para enfrentar y disminuir el fenómeno del embarazo adolescente deben sumarse las familias y el resto de las instituciones y grupos de la comunidad encargados de potenciar la salud sexual y reproductiva entre los menores de 18 años.
