Madrid, 20 ago.- La salida del Real Madrid del brasileño Carlos Henrique Casemiro dejará un vacío importante en el club, pero hoy la noticia es que el fútbol bling bling es el que manda.
Un fichaje por 70 millones de euros, más 15 millones en variables, cuatro años de contrato y otro prorrogable, y un salario anual de siete millones de euros por encima del actual (a 18 millones) son las razones de peso de esta inesperada y dinámica operación.
En los prolegómenos de su traslado a Inglaterra para jugar con el Manchester United, el mediocampista de contención es centro de atención del balompié en España, muy en especial con mensajes de sus compañeros de la “casa blanca”.
Tendrá su despedida oficial de los merengues el lunes próximo, mientras se suceden en redes sociales y medios numerosas muestras de cariño, respeto y admiración, entre ellas una de las más sentidas, del alemán Toni Kroos, su compañero en los llamados “tres tenores” o “triángulo de las Bermudas” de la medular madridista.
Otro de sus socios indispensables, el croata Luka Modric, también le dijo adiós con emoción en Twitter, lo mismo que los españoles Lucas Vázquez y Marco Asensio, el arquero belga Thibaut Courtois y el defensa austriaco David Alaba.
«He vivido la historia más maravillosa que jamás pensé. Espero volver algún día a la que siempre será mi casa. Ni en mil vidas podré devolveros al Real Madrid y al madridismo todo lo que me habéis dado. Por siempre…Hala Madrid!», escribió Casemiro en redes sociales al lado de Kroos y Modric, en el Santiago Bernabéu en la celebración por la última Champions League.
Aunque el técnico italiano del Real Madrid, Carlo Ancelotti, trató de quitar hierro a la pérdida de uno de sus pilares, se tomó las cosas con resignación. “Tenemos seis mediocampistas (Kroos, Modric, Tchouaméni, Camavinga, Valverde y Ceballos). Son suficientes para manejar toda la temporada”, zanjó el entrenador.
Sin embargo, el protagonismo de Casemiro siempre ha sido fundamental en el equipo y sus prestaciones se echarán de menos en un inicio, como reconocieron analistas de los diarios Marca y As Deportivo.
El mazazo tomó desprevenidos a Ancelotti y probablemente a varios de los otros brasileños que forman parte del elenco, como Vinicius, Rodrygo y Militao.
El traspaso se concretó en menos de 72 horas, aunque se dice que emisarios del Manchester United ya habían sondeado el terreno a inicios de agosto. Esta noche será la primera prueba de fuego para el Real Madrid, sin Casemiro y con los ensayos del técnico, a priori con los jovencitos franceses Aurelien Tchouaméni y Eduardo Camavinga, ante el Celta de Vigo.
(PL)
