Agosto, 2024.- Poeta y novelista, cuentista, ensayista y pensador estético; investigador y asesor de Literatura y Lingüística de la Academia de Ciencias de Cuba, José Lezama Lima fue hasta la mitad de los años sesenta del pasado siglo XX un escritor prácticamente desconocido.
Nacido el 19 de diciembre de 1910, se graduó de abogado en 1938, profesión que ejecutó durante algún tiempo; en 1949 ingresa como funcionario en la Dirección de Cultura del Ministerio de Educación y tras el triunfo revolucionario del 1.ro de enero de 1959 pasó a dirigir el Departamento de Literatura y Publicaciones del Consejo Nacional de Cultura, y llegó a ser uno de los vicepresidentes de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Aun cuando se dedicó sobre todo a la poesía y al ensayo, se le recuerda por su faceta de novelista, en concreto por su obra Paradiso, publicada en 1966 con gran repercusión internacional; la aparición del poema Muerte de Narciso significó un hito en el contexto literario cubano por lo renovador de su propuesta formal y conceptual.
Lezama Lima fundó y dirigió varias publicaciones literarias de gran calidad, entre las que se incluyen Verbum, Espuela de Plata, Nadie parecía y finalmente Orígenes, considerada por muchos como la mejor revista del idioma español en su tiempo y el empeño más fructífero de cuantos emprendió en la labor editorial.
En poesía, publicó Muerte de Narciso, Enemigo rumor, Aventuras sigilosas, La tijera, Dador, Posible imagen de Lezama Lima, Poesías completas y Fragmentos a su imán; y trascienden sus imaginativos y poéticos ensayos Coloquio con Juan Ramón Jiménez, Arístides Fernández, Analecta del reloj, La expresión americana, Tratados en La Habana, Las imágenes posibles y la colección La cantidad hechizada.
De estilo barroco, y considerado uno de los autores más importantes de la literatura hispanoamericana, congregó en torno suyo a poetas de la talla de Gastón Baquero, Cintio Vitier, Eliseo Diego, Virgilio Piñera y Octavio Smith, entre otros, y su obra ha influido en una gran cantidad de escritores de su época y posteriores.
José Lezama Lima participó en las revueltas estudiantiles contra la dictadura de Gerardo Machado, junto a Alejo Carpentier fue una de las más grandes figuras que ha dado la literatura cubana; falleció a los 65 años, el 9 de agosto de 1976 y su casa en La Habana es hoy un museo.