La Habana, 14 sep.- Con un espíritu constructivo, la venidera Cumbre del Grupo de los 77 y China abordará problemáticas urgentes que enfrentan hoy las naciones del Sur, destacó el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez.
La víspera, en declaraciones a la prensa, el canciller señaló que la cita, enfocada en los «Retos actuales del desarrollo: Papel de la ciencia, la tecnología y la innovación», propiciará un debate de alto nivel, sustancial, con pronunciamientos contundentes sobre los temas políticos y económicos más apremiantes para las naciones en desarrollo en medio de la crisis internacional sistémica.
La Cumbre, que tendrá lugar el próximo viernes y sábado en La Habana, busca debatir los principales desafíos y cuestiones medulares de las naciones del Sur, destacó Rodríguez, quien anticipó un evento ampliamente participativo, con asistencia de delegaciones de alto nivel que serán recibidas con la mayor hospitalidad por el pueblo de la isla.
Señaló que en la última jornada de la cita se aprobará una declaración final, cuyo proyecto ya fue consensuado mediante un proceso de negociación por parte de los embajadores de los países miembros del bloque, ante el capítulo del Grupo en Nueva York.
El jefe de la diplomacia cubana comentó que el texto es leal a los propósitos y principios del grupo, atento a las necesidades de los países en desarrollo y apegado firmemente al reclamo del derecho al desarrollo en medio de un orden internacional cada vez más excluyente e injusto.
Resaltó que el documento fue concebido a través de un proceso de negociación amplio, participativo, armonioso y constructivo.
Según adelantó, el texto hace un esbozo general y crítico sobre los principales obstáculos para el desarrollo de las naciones del Sur y llama al establecimiento de un nuevo orden económico internacional, a la vez que reclama una reforma profunda de la arquitectura financiera del orbe.
Asimismo, aboga por el tratamiento adecuado a la creciente deuda externa, por cumplimiento de los compromisos internacionales en materia de ayuda oficial al desarrollo, que son una obligación moral de los países industrializados, y por la financiación del enfrentamiento al cambio climático.
La declaración también solicita celebrar una reunión de alto nivel en la materia en el seno de la ONU y propone declarar un día internacional de la ciencia, la tecnología y la innovación en el Sur.
Cuba asumió la presidencia pro tempore de la agrupación en enero último, primera ocasión en que el país caribeño lidera este mecanismo.
Este año La Habana fue sede de eventos relacionados con el G77 y China, entre ellos, las reuniones de ministros de Educación, Cultura y Turismo de sus 134 estados miembros.
Surgido en junio de 1964, este grupo de concertación es el más amplio y diverso de la esfera multilateral.
Tomado de Prensa Latina