Florida, 13 abr.- La defensa del movimiento cooperativo y campesino demanda, además del funcionamiento integral de sus estructuras y del crecimiento productivo, trabajar con firmeza en el enfrentamiento a los fenómenos delictivos y de corrupción que lastran los resultados y limitan el buen desempeño del sector.
Así lo reclamó en Florida Yailé Castellanos Manso, representante del Comité Nacional de la Asociación de Agricultores Pequeños (ANAP), durante un intercambio reciente con directivos de la organización agraria del municipio, donde llamó a aplicar al pie de la letra las orientaciones de ese organismo superior en busca de lograr eficiencia en tareas como el uso de la tierra, la atención a los asociados y productores, el trabajo político ideológico, la contratación y acopio de alimentos agropecuarios y el combate al delito, entre otros temas.
Al referirse al impacto del hurto y sacrificio de ganado mayor en el ámbito campesino, la funcionaria reiteró la importancia de extremar las medidas de prevención y protección de la masa animal en cada finca, destacó el papel de las juntas directivas en la conducción de este encargo y criticó las actitudes de complicidad o encubrimiento de algunos ganaderos, frente al accionar de los cuatreros y delincuentes.
De igual forma, y según se dijo, el combate al delito en el sector campesino del municipio de Florida debe extenderse al control sobre el desvío de cosechas y productos comprometidos con la industria y el consumo social, la compra-venta ilegal de rebaños y la especulación con los precios de los alimentos, a partir de la retención y comercialización oportunista de renglones de alta demanda popular.
