Florida, 28 nov.- A 65 años de aquel 26 de noviembre, cuando la respuesta de ¡“Yo soy el maestro”!, ensañó la cólera asesina en un adolescente alfabetizador y su alumno, Pedro Lantigua, estudiantes y educadores de la institución educativa del nivel primario Manuel Ascunce Domenech recordaron este martes la efeméride.
Al intervenir en el acto conmemorativo, la maestra María de los Ángeles Ojea, en nombre de los educadores del centro expresó el deber de continuar el camino que con mucho valor emprendió Manuel Ascunce, sostenido por la vocación y el ejemplo de quienes ofrendaron sus vidas para que hoy en Cuba la Educación no solo sea un derecho del pueblo, sino orgullo para mostrar el mundo.
El momento resultó oportuno para efectuar el abanderamiento de los círculos de interés pedagógicos de las secundarias básicas y las aulas pedagógicas de las instituciones educativas del nivel primario, con la presencia de Niurka Turiño, jefa de esa enseñanza, Belkis Álvarez Teja, subdirectora de la Dirección General de Educación, Ainelys Herrera Molina, diputada al Parlamento cubano y representantes del Consejo Popular Ibarra, familiares de los estudiantes y vecinos de la comunidad.
Durante el acto de homenaje a Manuel Ascunce Domenech el alfabetizador Gumersindo Villegas Martínez compartió anécdotas de la Campaña de Alfabetización, una verdadera proeza de las letras en el país, en la cual se alistaron, como él, valiosos jóvenes y adolescentes en el empeño noble de instruir a todo un pueblo que hasta ese momento permanecía sumido en la ignorancia.