Florida, 14 nov.- En el municipio de Florida se trabaja sin descanso para concluir el año en curso con el menor índice posible de mortalidad materno infantil, luego de un periodo cargado de amenazas contra este significativo programa del sector de la Salud Pública, al que contribuyen, además, diferentes actores socioeconómicos, políticos y de masas del territorio.
Con una tasa, hasta la fecha, de 6,1 por cada mil nacidos vivos en niños menores de un año, el sistema de asistencia médica y el resto de las autoridades floridanas mantienen una vigilancia estricta sobre el desarrollo del embarazo y fiscalizan de forma sistemática, las condiciones de vida, alimentación y cuidados de las gestantes, puérperas y lactantes en esta demarcación camagüeyana.
Instituciones como el Hogar Materno, el hospital municipal Manuel Piti Fajardo y el pediátrico Leopoldo Rey Sampayo constituyen pilares básicos en la defensa de la supervivencia de la madre y el bebé, con el respaldo imprescindible del médico y la enfermera de la familia en la primera trinchera de combate por la calidad de vida y el bienestar de ambos seres.
Hasta el cierre estadístico del pasado lunes 11 de noviembre, en Florida se dio la bienvenida a un total de 223 recién nacidos, los cuales significaron la mayor suma de felicidad para el 99 por ciento de las familias que esperaban aquí ese regalo en la actual etapa.
