Ciudad de Guatemala, 10 jun.- El Gobierno de Guatemala busca hoy responder a la sed de conocimiento e identidad en el pueblo con la declaración del año del escritor Miguel Ángel Asturias, Premio Nobel de Literatura 1967.
En el Patio de la Paz del Palacio Nacional de la Cultura (sede del Ejecutivo), el presidente Bernardo Arévalo expresó que en tal sentido durante los próximos 12 meses desarrollarán una serie de actividades y programas.
Durante el acto conmemorativo por los 50 años del fallecimiento de Asturias, el mandatario consideró que el legado de este puede llegar a más habitantes del país, de todas las generaciones, en todo el territorio.
Celebrar su herencia es hacerlo por Guatemala, es reconocer que podemos darle al mundo cosas muy grandes, trascendentales, remarcó el jefe de Estado.
Agradeció a la familia Asturias por permitir que el también abogado, periodista y diplomático regrese a casa, tras la decisión confirmada antes de repatriar los restos durante la actual administración.
Para que pueda finalmente volver al seno de la nación que ayudó a construir, a la patria que un día le fue negada, enfatizó en el homenaje Arévalo.
A su juicio, “hablar de Asturias es hablar de nuestra historia, una vivida en carne propia, en la lucha estudiantil contra el dictador, en el servicio público, en la participación política activa y en el injusto y cruel exilio”.
Pero, agregó el mandatario, en la impresa, en una obra literaria que se entrelaza de genial narrativa, que es a la par real y mágica.
Comentó además que Asturias llevaba a su país bien adentro, en su espíritu, en su alma, era más que un gran guatemalteco, un artesano de la identidad chapina, significó Arévalo.
Si bien sus novelas, sus versos tocan mentes y los corazones de forma universal, solo nosotros, de modo exclusivo, podemos reconocernos en su literatura, expresó el político de 65 años, sociólogo de profesión.
La Guatemala de hoy no es la misma que la de ese momento, aunque la vida lejos por causas injustas sigue siendo una realidad para muchos de nuestros hermanos y hermanas, afirmó.
Aseguró que actualmente existe un ánimo en la sociedad guatemalteca de conocerse más profundamente, de reflexionar sobre sí misma a través del arte y la cultura.
Las autoridades inauguraron la muestra itinerante Vida y obra de Miguel Ángel Asturias, en colaboración con la embajada de Francia y la Alianza Francesa, que permanecerá en los pasillos del Palacio Nacional de la Cultura.
El escritor, quien recibiera el Premio Lenin de la Paz 1966, concibió El Señor Presidente, Hombres de Maíz, Mulata de tal, Tres de cuatro soles, El Papa Verde y Los ojos de los enterrados, entre otras sugerentes obras.
Está enterrado en el cementerio de Père Lachaise en París y su tumba coronada con una réplica de la Estela 14 de Ceibal, sitio arqueológico de la civilización maya.
Tomado de Prensa Latina