Junio, 2024.- Enrique Otero Fernández, conocido por todos como Gallego Otero, fue un científico popular que aporta a una de las ramas de la Salud Pública, la Medicina Natural, una tradición familiar que desarrolló de manera incansable, por lo que fue merecedor de diferentes reconocimientos y condecoraciones por distintas entidades y personalidades.
Con una niñez que siempre recordó como terrible, empezó a trabajar a los diez años y durante su juventud realizó disimiles oficios de campo por el almuerzo y seis pesos a la semana, para contribuir al sustento de su familia.
Otero Fernández se incorporó al proceso revolucionario en 1958 y después de enero de 1959 fue fundador de las Milicias, de la Policía Nacional, los Órganos de la Seguridad del Estado, los Comités de Defensa de la Revolución y los Poderes Populares; participó en la lucha contra bandidos en el Escambray, y en el primer Congreso del Partido Comunista de Cuba y organización a cuya dirección estuvo vinculado en Cumanayagua, Las Villas y Cienfuegos.
Durante años, a instancias del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el Gallego Otero se dedicó a atender una finca agroecológica y agrobiológica, ubicada en la premontaña del macizo Guamuhaya, en el municipio de Cumanayagua, y por su meritoria labor recibió varias condecoraciones, entre las que sobresalen la Orden Playa Girón, las Medallas Combatiente de la Lucha Clandestina, de la Lucha Contra bandidos y Servicio Distinguido de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, junto a otros.
Su sabiduría natural y los resultados positivos de la labor desplegada por el Gallego Otero hizo que el Instituto Nacional de Ecología y Sistemática le otorgara la Condición de Científico Popular, por lo que evocamos su valioso accionar este día 4 de junio, cuando se conmemora el aniversario 98 de su nacimiento.