Nueva Delhi.- La biotecnología, de conjunto con iniciativas gubernamentales, cumple en la India un importante rol en la configuración, desarrollo y resultados en la agricultura, uno de los principales sectores de la economía del país asiático y fuente de sustento para aproximadamente el 55 por ciento de su población.
Por Livia Rodríguez Delis
Corresponsal jefa en la India
La mayor nación del subcontinente surasiático tiene el rebaño de búfalos más grande del planeta, la mayor superficie plantada de trigo, arroz y algodón y es el productor líder de leche, legumbres y especias.
Para la protección y el continuo crecimiento del mercado de frutas, verduras, té, pescado de piscifactoría, caña de azúcar y otros productos, el gobierno incluye en su política el impulso de la biotecnología motivado por la necesidad de fortalecer los campos y las plantaciones ante el peligro latente y creciente de las afectaciones que provoca el cambio climático.
El 2023 batió récords climáticos, acompañados de condiciones meteorológicas extremas que dejó un rastro de devastación y desesperación, afirmó la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en un informe presentado en la Cumbre mundial sobre el clima COP28 en Dubái.
Ese año, por ejemplo, los catastróficos estragos de la temporada del monzón en la India, que dura de junio a septiembre, fueron significativos con más de 400 fallecidos y daños materiales superiores a los mil 420 millones de dólares en Himachal Pradesh, al norte del país, según fuentes gubernamentales.
Mientras, en el sur indio llovió tan poco que se registró la temporada de monzón más seca desde 1901 y la situación obligó al gobierno de Karnataka a declarar condiciones de sequía en la mayor parte del estado.
También 2023 fue particularmente caliente en la nación surasiática, que experimentó días con temperaturas por encima de los 48 grados y altos niveles de radiación solar, y de acuerdo con Mrutyunjay Mohapatra, director general de Meteorología del Departamento Meteorológico, el norte registró un rápido aumento de mercurio en comparación con las partes del sur.
Ante este panorama, la biotecnología desempeña un importante rol para mejorar la producción de alimentos con métodos de diagnóstico y biocontrol de enfermedades, cultivo de tejidos bajo ambientes controlados y producción de microorganismos benéficos promotores del crecimiento vegetal.
Asimismo resulta una alternativa para el control biológico de enfermedades y plagas, la generación de productos orgánicos para consumo humano y el mejoramiento genético asistido por marcadores moleculares.
En consonancia con ello, las autoridades indias reconocen la preferencia generalizada por los productos agrícolas orgánicos debido a la creciente conciencia ambiental y sobre las ventajas de la agricultura sostenible, así como el aumento de la demanda de cultivos nutritivos, de alto rendimiento y que requieran menos recursos.
Además, se experimenta en el mundo una creciente adopción de prácticas agrícolas sostenibles para mejorar la calidad de los cultivos, conservar el agua, minimizar el uso de fertilizantes químicos y reducir los impactos ambientales.
SYMBIOTIC SCIENCES, UN ESTUDIO DE CASO
El desarrollo de biofertilizantes es favorecido en la India por la inclinación cada vez mayor hacia una agricultura sostenible centrada en mejorar la salud de las plantas, la fertilidad del suelo y la promoción de una gestión eficiente del agua, entre otros factores.
El mercado está siendo testigo de un aumento constante de las iniciativas de investigación y desarrollo, así como de las inversiones que dan como resultado una tecnología mejorada, una superior cadena de suministros y el uso de materiales orgánicos para fabricar productos de alta calidad.
Dentro de esa dinámica se encuentra Symbiotic Sciences, fundada en 2009 con la premisa de aprovechar y maximizar el potencial de los biorrecursos para la agricultura con vista a promover prácticas agrícolas sostenibles de forma económica, de acuerdo con declaraciones a Prensa Latina del fundador y presidente, Aditya Malhotra.
Aun con el relativo poco tiempo en el sector, Symbiotic resulta uno de las empresas con éxito en escala en la utilización de una tecnología rentable para producir una variedad de especies de hongos por fertilización in vitro en un ambiente estéril, entre otros productos.
Una de las ganadoras del premio de la Conferencia India 5000 Business Award este año, respaldado por grupos especializados de mercado y de negocios, la startup, una empresa emergente de poco más de 100 trabajadores, concentra esfuerzos en el desarrollo, aplicación y adopción comercial de soluciones bioagrícolas naturales basadas en hongos micorrízicos arbusculares (HMA) y otros microorganismos beneficiosos.
Nuestro equipo de investigación se centra en el desarrollo de soluciones innovadoras y métodos de aplicación para lograr escalabilidad, coherencia y rentabilidad para comercialización y adopción de aplicaciones de micorrizas en agricultura, dijo a Prensa Latina Shouvik Chowdhury, director ejecutivo de la planta ubicada en Gurgaon, en el estado indio de Haryana.
Su familia de productos SyMyco, viables, saludables, genéticamente puros y cuyos estándares de calidad están avalados por las normas internacionales y nacionales, son aplicables en diversas formulaciones en la agricultura convencional y orgánica, la horticultura, silvicultura y el paisajismo, y para el control de erosión y restauración de suelos. Al decir de Chowdhury, su mantra son las prácticas sustentables en el sector consciente y el compromiso con la entrega de mayor productividad, rentabilidad y un planeta más limpio.
El producto estrella es el Mycorrhiza, un biofertilizante que contiene esporas del grupo de hongos Glomus, cuyas especies, más de 85 conocidas hasta el momento, forman relaciones simbióticas con las raíces de las plantas.
De acuerdo con el directivo de la planta, dicho producto resulta una opción de alta calidad y no contiene otras especies, asegurando el carácter atóxico, no peligroso y no patógeno, y el cual es de fácil transportación y manipulación, sin representar ningún riesgo para la salud humana, de las plantas o el medio ambiente.
Entre sus beneficios resaltan una mayor absorción de nutrientes por las plantas con un impacto en un mejor crecimiento, vigor y salud general, igualmente torna los cultivos más resistentes a la sequía, pues aumenta la capacidad de retención de agua del suelo, reduciendo el estrés de las plantas durante los períodos secos, señaló.
Con su aplicación los cultivos alcanzan una mayor resiliencia a condiciones de sequía, lo que les permite prosperar incluso en entornos difíciles, explicó.
Mycorrhiza actúa, asimismo, como un escudo para las cosechas, fortaleciendo su sistema inmunológico contra patógenos dañinos, ya que estimula la producción de compuestos de defensa, ayuda a las plantas para combatir enfermedades y reducir la necesidad de intervenciones químicas, dijo el directivo.
También promueve a la estabilización del suelo, previniendo la erosión y creando un ambiente ideal para desarrollo radicular, precisó. “Entendemos la importancia de las prácticas agrícolas sostenibles y la necesidad de proteger los ecosistemas delicados”.
Gracias a su relación con universidades y centros investigativos indios, en Chennai principalmente, y de otros países, la entidad avala sus producciones con evaluaciones rigurosas, lo que le ha permitido ganar el éxito y la confiabilidad de sus clientes, la mayoría en Estados Unidos.
Vale destacar que su proceso de producción se desarrolla con equipos de alta tecnología y en busca de la diversificación de los biofertilizantes, teniendo en cuenta la responsabilidad social de la empresa con el ahorro de energía, recursos hídricos, el cuidado del medio ambiente y de la salud humana.
Empresas como Symbiotic Sciences muestran el maridaje entre la biotecnología y la agricultura con impacto positivo en la producción y de manera proactiva y con conciencia en la reducción de la huella de carbono y del uso de productos químicos.
Demuestra que es posible contribuir al aumento de la productividad, de la rentabilidad y del logro de productos nutricionalmente más ricos, con buenas prácticas dirigidas a la preservación de la salud del planeta y la especie humana.
Tomado de Prensa Latina