Florida, 10 dic.- El inicio del período seco y la proximidad de la zafra azucarera constituyen señales que obligan a los agricultores del municipio de Florida a adoptar medidas para prevenir la ocurrencia de incendios en áreas de pastoreo, reservas forestales y macizos cañeros.
Trabajar a tiempo en la implementación y limpieza de guardarrayas y trochas cortafuego, activar los puntos de vigilancia y mantener de alta las brigadas y medios técnicos para el enfrentamiento a las candelas son claves en el propósito de evitar o minimizar los daños por quemas imprevistas.
La acumulación excesiva de material combustible en el terreno, la deficiente custodia en lugares de alto riesgo, la furia de la naturaleza y, sobre todo, la negligencia humana, se mantienen como causas y condiciones fundamentales de la ocurrencia y avance indiscriminado de los incendios en áreas cañeras y pastizales.
Entre los sectores floridanos más afectados por ese fenómeno en el primer semestre del año en curso resalta el azucarero, dónde se registró la pérdida de cientos de toneladas de materia prima en los campos de caña y el consecuente deterioro económico-financiero de las unidades con mayor incidencia de incendios sorpresivos.
En consecuencia, es preciso repetir hoy, más que nunca, esa inveterada, pero sabía consigna que asegura que ¡Un incendio siempre puede evitarse!
