Florida, 31 jul.- El sistema de la Defensa Civil cubana responde al principio de la Revolución y la política estatal de garantizar en cada territorio la protección de la vida de las personas y los bienes de la economía, ante situaciones de desastres de origen natural o tecnológico.
En ese sentido es prioridad gestionar y organizar de forma permanente actividades preventivas para reducir vulnerabilidades y riesgos de desastres en instituciones laborales, áreas agrícolas, fábricas y en comunidades, dónde requiere de la participación de la ciudadanía en función de elevar su propia seguridad.
Ante la amenaza y el impacto de huracanes, otros fenómenos naturales de alta intensidad y cualquier tipo de situación de desastre, el Estado cubano no escatima esfuerzos ni recursos, a través del sistema de la Defensa Civil, para salvaguardar la vida de la población en cada localidad afectada.
En este caso, también, sobre la base del principio martiano y nacional de con todos y para el bien de todos, el sistema de la Defensa Civil demanda de la fuerza popular para materializar cuánta acción preventiva sea necesaria, en función de reducir el peligro y preservar las vidas humanas y los bienes de la economía familiar y estatal, frente a situaciones de desastres.