Florida, 9 abr.- El municipio de Florida cerró el primer trimestre del año en curso con una tasa de mortalidad infantil de 16, 6 por mil nacidos vivos, un indicador que debe continuar su tendencia a la disminución a partir del cumplimiento de las responsabilidades individuales, familiares, comunitarias e institucionales en el cuidado del embarazo y la maternidad.
Hasta la fecha vieron la luz en el territorio floridano un total de 60 nuevos infantes, en tanto se lamentó aquí el fallecimiento de un bebé antes de cumplir los primeros 12 meses de vida.
La estrategia de trabajo del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) en el actual calendario incluye reforzar las acciones para la captación temprana del proceso de embarazo; la vigilancia sobre aquellas gestantes con riesgo preconcepcional, el ingreso inmediato en unidades hospitalarias en caso de amenaza para la salud de la madre y del feto, y la promoción del conocimiento acerca del peligro y las consecuencias del embarazo en adolescentes.
Frente a las carencias actuales de recursos materiales y otros medios que debieran respaldar plenamente al sistema de asistencia médica y al resto de los actores socioeconómicos en su apoyo al referido programa resaltan aquí, sobre todo, la experiencia de los profesionales de la Salud Pública, el sustento de la medicina familiar como del PAMI, y la voluntad gubernamental de no dejar a nadie desamparado por difíciles que sean los tiempos.
